Cierre anual fiscal: Aspectos clave a considerar

El fin de año suele ser sinónimo de celebración y alegría, pero también puede significar un verdadero dolor de cabeza para las empresas. Por un lado, es la época que mayores ventas representa, mientras que, por el otro, es necesario dar cierre a cuestiones operativas y financieras para comenzar el siguiente año con todo en orden. Estas últimas semanas del año son clave para anticiparse a los cierres contables, administrativos y financieros de tu empresa. Una de estas gestiones corresponde al cierre de año fiscal. Si es tu primer año en operaciones o si no tienes claro en qué consiste este proceso, sigue leyendo nuestro artículo.

¿Qué es el cierre del año fiscal?

El cierre de año fiscal es un proceso que deben cumplir las empresas para evaluar el cumplimiento de sus obligaciones tributarias durante cada ciclo anual. Esto se lleva a cabo mediante un cálculo de los impuestos pagados al fisco, así como de los saldos pendientes, en relación con los gastos e ingresos percibidos por una persona moral.

Mediante un cierre fiscal se obtiene la utilidad fiscal neta (UFIN), un monto compuesto por la resta del resultado fiscal del ejercicio, el ISR pagado, el importe de las partidas no deducibles para ISR y la participación de los trabajadores en la utilidad de la empresa o PTU. 

La diferencia entre un cierre fiscal y cierre contable 

Generalmente, un cierre de año fiscal requiere llevar a cabo uno contable, en el que la empresa debe calcular los movimientos realizados durante el periodo. Estos números son la base para cotejar que las cuotas fiscales correspondan con las ganancias de la empresa.

El cierre de año contable generalmente comprende todas las actividades que una organización llevó a cabo desde el 1 de enero y hasta el 31 de diciembre, por lo que el cierre de año fiscal también suele ejecutarse en esta temporada. Sin embargo, no existe un requisito de que así sea, ya que la presentación de la declaración anual de impuestos se efectúa en el primer trimestre del año siguiente.  

Importancia del cierre fiscal 

El primer motivo por el que es importante llevar a cabo el cierre de año fiscal es que, al hacerlo, cumples con las exigencias de la administración tributaria en el país. Sin embargo, existen otros beneficios que debes tomar en consideración:

• El cierre de año fiscal permite cotejar que la información que dispones sobre tus ingresos y egresos se correspondan con tus declaraciones ante el SAT.
• Evitas multas por falta de pago de tus impuestos y por retraso en el cumplimiento de tus obligaciones.
• Ayuda a mejorar la administración de tus recursos.
• Te permite evaluar opciones para reducir el pago de tus impuestos.

Por otro lado, con los resultados de tu cierre fiscal podrás evaluar la estrategia contable para tu siguiente año y mejorar el seguimiento de tus objetivos. 

Documentación y actividades previas al cierre fiscal 

Como hemos visto, antes de efectuar tu cierre fiscal es deseable que hayas ordenado tu actividad contable durante el periodo económico. Esto te ayudará a tener material que utilizarás para cotejar tus números financieros: ingresos, egresos, retenciones, pagos, deudas y créditos, entre otros.

Además, deberás contar con la siguiente documentación: 

• Comprobantes de pago de tus impuestos, en caso de presentar declaraciones periódicas.
• CFDIS emitidos durante el periodo.
• Facturas de gastos realizados durante el ciclo.
• Comprobantes de pago de salarios y de cuotas de inscripción al Seguro Social.
• Control y cierre de inventarios.
• Conciliación bancaria, que te permitirá comparar tu control contable con los movimientos de tu cuenta bancaria empresarial.

Asimismo, deberás asegurarte de que todas tus facturas estén en orden, que sean correctas y que has cancelado aquellas que no se hayan concretado.

Recomendaciones para realizar del mejor modo tu cierre fiscal

El cierre fiscal es un tema que requiere ser tratado con seriedad y cuidado, pero esto no significa que deba ser un proceso difícil. Por el contrario, algunas estrategias te pueden ayudar a simplificar este proceso y a corroborar que no has cometido ningún error. Por ejemplo:

1. Realiza cortes periódicos: Llevar a cabo cortes cada mes o trimestre te puede ayudar a mantener el orden en tus operaciones financieras y controlar el cumplimiento de tus obligaciones fiscales. Esto hará que, además, mantengas en orden tus registros y documentación, que puedas encontrar información fácilmente y no olvides fechas importantes o pendientes.
2. Haz un precierre fiscal: Es recomendable que al menos un mes antes del cierre de año fiscal lleves a cabo un simulacro de cierre en el que te asegures de que tienes todo en orden. Si aprovechas tus cortes periódicos, solamente deberás confirmar las operaciones realizadas en las últimas semanas del año.
3. Familiarízate con la reglamentación vigente: Es importante que te mantengas actualizado en las modificaciones a las normativas, calendarios y formatos para que no tengas que rehacer todo tu trabajo o ceñirte a fechas que no tenías contempladas. 
4. Apóyate en el uso de tecnologías: Llevar el control de todas tus operaciones y hacer el cálculo de todos tus movimientos financieros y fiscales puede ser una tarea compleja para tu departamento contable. Para ayudarte a realizar el cierre de año fiscal te recomendamos recurrir a tecnologías de almacenamiento, procesamiento y cálculo de tu documentación y números. Por ejemplo, puedes aprovechar sistemas de bases de datos en la nube para que tus empleados mantengan actualizados tus controles o usar plataformas de facturación automatizada.

Prepárate para tu cierre de año fiscal y asegúrate de terminar este año con todas tus obligaciones en orden. Para mayor claridad a la hora de tratar con temas de este tipo, apóyate de nuestro servicio de asesoría de nómina, con el que expertos contables y noministas te ayudan y enseñan a superar cualquier reto en la gestión de tu nómina.