Encuesta: ¿Qué es? ¿Cuáles son sus partes?

Las encuestas son como tener un «amigo» que nos cuenta qué pasa en diferentes temas, desde captar qué le gusta a la gente hasta decidir qué es lo mejor para el Perú. Pero, para que las encuestas nos den el dato real, hay que tener un método para que la información que juntemos sea de fiar y sea el panorama tal cual de lo que piensa la gente. Aquí te contamos sin rodeos, qué es una encuesta, por qué en Perú es una herramienta de primera y unos truquitos para diseñarla de modo que obtengas justo la información que buscas.

¿Qué es una encuesta?

Una encuesta es como preguntarle a un grupo de gente, con unas preguntas armadas, para saber qué piensan, cómo se sienten, qué hacen o cómo son. La idea es juntar información sobre un tema.

 Hay diferentes tipos de encuestas, dependiendo de para qué se usen:

• Descriptivas: Analizan tendencias y características de un grupo.
• Analíticas: Buscan establecer relaciones entre variables.
• Muestrales: Aplicadas a una porción de la población.
• Censales: Realizadas a la totalidad del grupo estudiado.
• Por método de aplicación: Pueden ser presenciales, telefónicas o en línea.

¿Cuál es la función de una encuesta?

Las encuestas son como «sacarle la temperatura» a la gente para tomar decisiones más acertadas en diferentes temas. No solo nos dan respuestas, sino que nos ayudan a ver qué sucede, a saber si lo que estamos haciendo está funcionando y a mejorar las ideas en las empresas, el gobierno y cuando investigamos cosas. Entre sus principales funciones destacan:

• Obtener datos objetivos sobre preferencias y opiniones.
• Analizar tendencias y detectar patrones de comportamiento.
• Tomar decisiones informadas en negocios, gobierno y otros sectores.
• Evaluar políticas, programas y estrategias para mejorar procesos.

¿Cuál es la importancia de las encuestas en el Perú?

Aquí en Perú, las encuestas son como la «llave» para sacar información real y tomar decisiones importantes con base en eso. Sus principales aplicaciones incluyen:

• Investigación de mercado: Las empresas las usan para entender a sus clientes y mejorar lo que venden.
• Toma de decisiones gubernamentales: Son clave para armar leyes y programas basándose en datos.

• Evaluación del impacto social y económico: Es como hacer un chequeo rápido para ver si esos proyectos realmente le dan una mano a la comunidad o si al final solo les están metiendo más líos en el día a día.

¿Diferencia entre encuesta y cuestionario?

Aunque a veces pensemos que son lo mismo, son dos cosas distintas:

• Encuesta: Es todo el proceso de investigar, desde que pensamos qué queremos saber hasta que analizamos las respuestas.
• Cuestionario: Es solo el papel o el formulario con las preguntas que usamos para la encuesta.

¿Cuáles son las partes que integran a una encuesta?

Para que una encuesta funcione de verdad y nos dé la información que buscamos, tiene que estar bien organizada y tener algunas partes importantes. Aquí te contamos cuáles son las piezas clave de una encuesta y para qué sirve cada una cuando estamos juntando datos:

Introducción

Es la primera sección de la encuesta y tiene un papel fundamental en la disposición del encuestado a participar. Debe incluir:

• Una breve presentación del encuestador o la institución responsable.
• Para qué hacemos la encuesta y por qué es importante la info que vamos a juntar.
• La promesa de que lo que respondan será secreto y nadie sabrá quién dijo qué, si es el caso.

Cuerpo del cuestionario

Esta es la parte central de la encuesta, donde están todas las preguntas ordenadas y con lógica. Para que la gente entienda bien y responda con precisión, es bueno que:

• Las preguntas estén juntas por temas o grupos.
• Se usen diferentes tipos de preguntas según lo que queramos averiguar (para que la gente escriba, elija opciones, etc.).
• No haya preguntas raras o confusas que puedan hacer que la gente responda cualquier cosa.

Datos demográficos

Esta parte junta datos importantes sobre la gente que responde, como cuántos años tienen, si son hombres o mujeres, qué estudiaron y dónde viven. Esta información nos ayuda a separar y ver los resultados con más detalle, encontrando qué pasa con diferentes grupos de personas.

Cierre y agradecimiento

La encuesta debe finalizar con un mensaje que:

• Exprese gratitud hacia los participantes por su tiempo y colaboración.
• Proporcione información adicional si es necesario (por ejemplo, cómo y cuándo se utilizarán los resultados).
• En algunos casos, puede incluir instrucciones finales, como enviar el cuestionario o proporcionar datos de contacto para consultas.

¿Qué pasos seguir para hacer una encuesta?

Para armar y usar una encuesta que funcione de verdad, hay que seguir unos pasos ordenados para asegurarse de que la información que juntemos sea precisa y nos sirva. Aquí te contamos cuáles son las etapas clave:

Definir el objetivo

Antes de iniciar una encuesta, es fundamental establecer con claridad qué se busca investigar. ¿Queremos saber qué tal le caemos a los clientes, si una ley está funcionando o qué se está moviendo en el mercado? Tener claro el objetivo nos ayuda a hacer preguntas que realmente vayan al grano.

Seleccionar la población objetivo

Hay que saber a quiénes vamos a preguntar. Puede ser mucha gente (todos los peruanos) o un grupo más pequeño (los clientes jóvenes de una empresa), dependiendo de lo que queramos averiguar.

Determinar el tamaño de la muestra

Como no siempre podemos preguntarle a todita la gente que nos interesa, elegimos a un grupo que represente a todos. El tamaño de ese grupo dependerá de qué tan exactos queremos ser, cuánta plata y tiempo tenemos, y qué tan seguros queremos estar de los resultados estadísticos.

Diseñar el cuestionario

Para que la encuesta funcione bien, las preguntas tienen que ser buenas. Para ello, se recomienda:

• Redactar preguntas claras y comprensibles.
• Evitar ambigüedades o sesgos en las respuestas.
• Elegir el formato adecuado (abiertas, cerradas, opción múltiple, escala de Likert, etc.).
• Organizar las preguntas de forma lógica y fluida.

Elegir el método de aplicación

El medio para aplicar la encuesta dependerá del acceso a los encuestados, el presupuesto y la naturaleza del estudio. Los métodos más comunes incluyen:

• Online: Formularios digitales, correos electrónicos o redes sociales.
• Presencial: Entrevistas cara a cara o encuestas en papel.
• Telefónico: Llamadas rápidas para obtener respuestas directas.

Recopilar los datos

Aquí es cuando lanzamos la encuesta, tal cual lo teníamos en mente. Es crucial estar atentos para que las respuestas sean de calidad y el grupo de gente que encuestamos sea un buen reflejo de todos.

Analizar los resultados

Al final, agarramos todas las respuestas y las revisamos con lupa para encontrar qué se repite, qué caminos siguen y qué ideas importantes salen de ahí. Los resultados nos sirven para decidir qué hacer, mejorar cómo se hacen las cosas o para apoyar investigaciones.

¿Qué tipos de preguntas a realizar en una encuesta?

Fíjate bien en cómo planteas las preguntas en tu encuesta; si las haces cortas y directas, te van a responder al toque y al grano, pero si les das espacio para explayarse, te van a soltar historias y detalles que son puro oro. También depende si les damos chance de elegir entre varias opciones. Por eso, las preguntas se agrupan en diferentes tipos:

Preguntas abiertas

Permiten a los encuestados responder libremente, proporcionando información detallada sin restricciones. Son útiles para recoger opiniones, percepciones o sugerencias.

Ejemplo: «¿Qué mejoras sugerirías para nuestro servicio?»

Preguntas cerradas

Ofrecen opciones de respuesta predefinidas, lo que facilita el análisis de datos y permite comparaciones entre encuestados. Se dividen en:

• Dicotómicas: Solo permiten dos opciones de respuesta, como «Sí» o «No».

Ejemplo: «¿Qué tan contento está con lo que le ofrecimos? (Sí/No)»

• De opción múltiple: Presentan varias alternativas para elegir una o más respuestas.

Ejemplo: «¿Qué factores influyen en su decisión de compra? (Precio, calidad, marca, recomendaciones)»

• De escala de valoración (Likert): Nos dejan ver qué tanto opina o qué tan contenta está la gente usando números, casi siempre del 1 al 5.

Ejemplo: «Del 1 al 5, ¿qué tal le pareció nuestro servicio?, siendo 1 ‘pésimo’ y 5 ‘¡lo máximo!’.»

Preguntas mixtas

Combinan elementos de preguntas abiertas y cerradas, ofreciendo opciones predefinidas pero permitiendo respuestas adicionales. Son útiles cuando se busca estructurar la información sin limitar la expresión del encuestado.

Ejemplo: «¿Qué medio de transporte utiliza con mayor frecuencia? (Carro, bicicleta, transporte público, otro: especifique)»

Elegir el tipo adecuado de pregunta es esencial para garantizar que la encuesta proporcione información relevante y fácil de analizar.

¿Cuál es un ejemplo de encuesta?

Las encuestas se usan en muchos lugares para juntar información importante y decidir con base en eso. Según lo que se quiera averiguar, pueden preguntar sobre qué tal les va a los clientes, cómo se siente la gente en el trabajo o qué opina el público. Algunos ejemplos comunes incluyen:

• Encuestas de satisfacción del cliente: Para saber qué tal les pareció un producto o servicio.
• Encuestas de clima laboral: Para evaluar cómo se siente la gente en la empresa.
• Encuestas de opinión pública: Para saber qué piensa la gente sobre temas de la sociedad o de política.

¿En qué consiste una encuesta en el ámbito laboral?

En el trabajo, las encuestas son como tener un «espía» que nos dice qué onda con la gente: si están felices y rindiendo. Nos ayudan a ver cómo se siente el equipo, qué los motiva, dónde podemos hacer las cosas mejor y si lo que estamos haciendo en la empresa está dando resultados.

¿Cuál es el rol de los recursos humanos en las encuestas laborales?

La gente de Recursos Humanos es clave para meter las encuestas en la empresa, porque así consiguen información valiosa para manejar al personal y mejorar el ambiente de trabajo. Su labor incluye:

• Definir objetivos y estructurar preguntas: Diseñar encuestas con preguntas claras y enfocadas en lo que importa.
• Garantizar la participación del personal: Animar a los empleados a responder y hacerles fácil el proceso.
• Analizar los datos y tomar decisiones: Entender los resultados para mejorar cómo se maneja la empresa.
• Mejorar el bienestar laboral: Hacer cambios según lo que encontremos para que el ambiente laboral sea más cómodo.

Aquí en Perú, las encuestas son clave para decidir bien, tanto para las empresas como para el gobierno. Si las armamos con cuidado, nos dan información de primera, lo que nos ayuda a entender mejor a la gente, a mejorar lo que hacemos y a usar mejor la plata.