Tabla de contenidos
- Siempre ten en mente tu objetivo
- Construye pequeños milestones
- Teamwork
- No castigues los errores
- Busca aliados
Cuando eres un emprendedor, que tu startup o tu negocio sea exitoso es el principal objetivo. Todas las actividades y todo lo que se haga en la empresa, es para asegurar que esto se cumpla. En realidad, lo que todos los emprendedores que han tenido una historia de éxito grandiosa sí pueden decir sobre este viaje es que no es fácil y no hay una fórmula mágica en donde haces A y luego B, entonces harás que tu negocio valga millones. Mucho tiene que ver con tener un conocimiento profundo del mercado y el otro es tener un equipo que sea lo suficientemente bueno y rápido para mejorar el producto o servicio que ofrezcas y que lo haga mejor que toda la competencia.
Hemos hablado con varios empresarios y emprendedores exitosos que nos han contado sus experiencias y lo que hicieron para hacer que sus negocios crecieran hasta donde están ahora.
Siempre ten en mente tu objetivo
Esta parte quizá suene un poco obvia pero es una forma de simplificar todas las cosas que tienes que hacer y quizá todos los obstáculos que enfrentes en tu día a día. Tener en mente siempre tu objetivo de hacer que tu empresa venda su primer millón de pesos o que adquieras tus primeros 50 clientes te ayuda en dos cosas:
- Te permite entender qué tipo de tareas sí le suman valor a tu trabajo y a lo que la empresa entrega a los clientes. Esto es mucho sobre Lean y cómo disminuir desperdicios de tu trabajo. No destines mucho tiempo o recursos a una actividad que va a traer poco o nada de valor a tu trabajo. Trabajar así te permite ser crítico y trabajar de forma más efectiva, así te enfocas en lo que realmente importa.
- Te ayuda a tener una actitud positiva. Es difícil quizá encontrar un balance en este aspecto porque tener en mente 24/7 tu objetivo puede ser autodestructivo, pero en las dosis adecuadas, pueden ser un driver buenísimo para mantenerte ocupado, positivo y con una mentalidad ágil.
Construye pequeños milestones
Tener grandes objetivos pareciera, al principio, muy difíciles de alcanzar. Aún más si tienes un equipo que también está trabajando constantemente contigo, cuando ven números tan grandes, es estresante y si no tienen las herramientas necesarias para sobrellevar ese estrés laboral, pueden desarrollar burnout y “quemarse” en el proceso. Por esta razón, te recomendamos que los objetivos grandes los partas en pequeños wins que te permitan no sólo medir un proceso paulatino, sino que también ayuda a tus empleados vean su trabajo reflejado y no se angustien con números muy agresivos. También hacerlo es bueno cuando estás buscando financiamiento para tu proyecto, los inversionistas querrán ver cómo has avanzado durante los años, poner pequeños objetivos puede ayudarte a mostrar que tu equipo es consistente.
Teamwork
A veces como fundador, es difícil que los dueños actúen más como un líder y no como un jefe. ¿En qué afecta esto? En muchísimo, un empleado que está comprometido con tu misión y lo que quiere lograr tu empresa necesita un líder, una persona que esté dispuesta a arremangarse la camisa y trabajar hombro con hombro. Para este punto es importante que le hagas saber a tu equipo que son un equipo y que todos están trabajando en lo mismo. Es importante que ellos tengan un ejemplo de cultura organizacional y de cómo se espera que ellos trabajen. Incluso las empresas que han sido exitosas, siguen estos valores y los mantienen hasta el día de hoy: estoy no solo ayuda en la unidad del equipo, sino que también abre las puertas para la innovación y para una comunicación completamente abierta.
Una buena práctica para cumplir con este punto es hacer que las personas que son manager o se encuentran las posiciones más altas de tu empresa tengan la costumbre de ayudar a los empleados que tienen tareas más de la operación diaria. Haciendo esto no sólo mejorarás la relación laboral que tienen los empleados con sus managers, sino que también los managers podrán encontrar esos puntos de mejora y hacer la operación día con día, más escalable.
No castigues los errores
Muchas empresas tratan de no cometer ningún error en el camino, creen que estos errores sólo les quitan tiempo, dinero y clientes. Sin embargo, no saben de la cantidad de conocimiento que se están perdiendo. Permite que los errores pasen en tu empresa, no creas que esto es sólo darles permiso a tus colaboradores para que metan el pie todos los días de la semana, sino que tu negocio agradecerá que no condenes los errores y permitas que los empleados aprendan de ellos. Lo que las empresas exitosas hacen para asegurarse que están fallando y que están aprendiendo de sus fallas es tener una reunión pequeña cada semana donde todos los integrantes hablan de los errores que tuvieron durante la semana, después cada uno explica cómo es que solucionaron el problema y cuáles son los siguientes pasos para que no vuelva a suceder.
Es importante también entender en este punto que no existe tal cosa como un plan perfecto, los procesos cambian, fallan y se transforman. Para que tus procesos evolucionen y mejoren, debes permitir que tu equipo pueda cambiar este proceso de manera fácil para así llegar a algo mucho más eficiente y que no tenga que pasar por un proceso burocrático que no aporta valor ni al equipo ni al producto final.
Busca aliados
Esto es definitivamente uno de los puntos más importantes para nosotros. Como dicen por ahí, Roma no se hizo solo ni en un día. Alíate no sólo de tu equipo, sino que es importante que conozcas personas de otras empresas e incluso de personas que han hecho lo mismo que tú estás haciendo en este mismo momento. Estas personas podrán darte insights que no tenías mapeado en tu cabeza e incluso pueden abrirte muchas puertas. Hablar sobre tu proyecto, tus dificultades y lo que aqueja al negocio no es mostrar debilidad, es abrir una conversación y abrir una relación donde ellos pueden ayudarte con consejos, contactos, etc.