Desempleo: ¿Qué es? y ¿Cuáles son sus consecuencias?

Imaginar a uno de cada cinco adultos buscando trabajo sin encontrarlo no es solo una estadística. Es una situación que afecta la economía, sí, pero también mina la motivación personal y deja marcas en la vida diaria de millones.

En 2023, no solo crecieron las cifras de desempleo; también empezamos a ver el efecto en la vida diaria de las personas. Perder el trabajo no es simplemente dejar de tener ingresos. Es enfrentar tensiones en casa, vivir con la incertidumbre día tras día, sentir cómo ese desgaste se extiende poco a poco en las comunidades.

El desempleo es un tema amplio, no se limita a una sola causa. Hay distintos tipos, razones que lo explican, consecuencias que se sienten en el día a día. Entenderlo bien nos puede ayudar a ver qué caminos tenemos para empezar a cambiar esa realidad.

¿Qué es el desempleo? 

El desempleo es más que una estadística. Es esa realidad en la que hay personas con la edad, la experiencia y las ganas de trabajar, pero simplemente no encuentran dónde. No porque no lo intenten, sino porque no hay suficientes espacios. Es en ese punto donde el sistema muestra sus fallas: cuando hay más personas buscando empleo que vacantes disponibles, algo no está funcionando como debería y la calidad de vida comienza a resentirse. La llamada “tasa de desempleo” refleja cuántos individuos, entre los 16 y 65 años, están buscando trabajo activamente sin encontrarlo.

El cálculo parece simple: se divide el número de personas desempleadas entre la población activa y se multiplica por 100. Sin embargo, la realidad laboral no siempre se ajusta a una fórmula. Existe el desempleo visible, el de quienes buscan activamente, y también otro más silencioso: el de quienes han dejado de buscar o aceptaron empleos de medio tiempo o mal remunerados ante la falta de alternativas.

¿Cuáles son los tipos de desempleo? 

Hay distintos tipos de desempleo, y cada uno tiene su propia lógica y origen. Entenderlos ayuda a ver el panorama completo:

• Desempleo cíclico: Tiene que ver con cómo va la economía en general. Sube cuando hay crisis y baja cuando hay crecimiento. Por ejemplo, en una recesión, cae la demanda de productos y servicios, y muchas empresas se ven obligadas a recortar personal.
• Desempleo estructural: Aparece cuando las habilidades blandas y duras que tienen las personas ya no empatan con lo que las empresas están buscando. Esto suele pasar cuando cambian las reglas del juego: llega la automatización, cambia la industria o simplemente ciertas competencias laborales dejan de ser útiles.
• Desempleo friccional: Es el más común y, en cierto sentido, el más “normal”. Es ese periodo en el que alguien está entre trabajos o buscando su primera oportunidad. Suele ser temporal y parte del movimiento natural del mercado laboral.
• Desempleo tecnológico: Se da cuando nuevas tecnologías empiezan a hacer el trabajo que antes hacía una persona. No es nuevo, pero sí cada vez más común, y nos obliga a repensar cómo preparamos al talento para lo que viene.
• Desempleo estacional: Afecta a sectores que dependen de ciertas épocas del año, como el turismo o el campo. En vacaciones o cosechas hay más contratación y empleos, pero al terminar la temporada, esos puestos suelen desaparecer.

¿Cómo afecta el desempleo a las personas? 

El desempleo no se limita al impacto personal. Sus efectos alcanzan a las familias, a las comunidades y terminan afectando también la estabilidad económica de un país. Para la persona, el daño en la mente puede ser muy fuerte. Perder el trabajo suele traer mucho estrés laboral, preocupación y, muchas veces, tristeza profunda. La incertidumbre que provoca no saber qué viene, sumada a las dificultades para conseguir empleo, puede afectar más de lo que se ve a simple vista. La salud mental empieza a deteriorarse, arrastrando con ella la confianza y, con el tiempo, también impactando el estado físico.

No saber qué pasará y lo difícil que es encontrar un nuevo empleo pueden dañar mucho la confianza en uno mismo. Esta inestabilidad en las emociones afecta la salud mental y del cuerpo.

En lo social, no tener trabajo puede llevar a que uno se aísle. Dejar el ambiente laboral también significa romper lazos y perder el apoyo de otras personas que, a veces, son muy importantes para tener bienestar social. Al no tener un trabajo que te haga hablar con gente todos los días, las personas pueden dejar de participar en cosas de la comunidad, haciendo que sientan menor pertenencia a la sociedad.

En la economía, el desempleo es un gran problema. No tener ingresos constantes causa problemas de dinero que afectan a la persona y a su familia. Esto, a su vez, hace que tengan menos dinero para gastar, lo que limita su capacidad para comprar cosas básicas o usar servicios.

¿Qué factores influyen en el desempleo? 

Las causas del desempleo son muchas y no siempre sencillas de entender. Desde temas ligados a la economía mundial hasta detalles propios del mercado laboral. Veamos ahora algunos de los elementos clave que tienen que ver con su origen y duración en el tiempo.

• Tiempos de crisis: Las compañías recortan plantilla para seguir a flote cuando hay una mala racha económica.
• Estudios y preparación: Contar con una buena formación y capacitación mejora mucho las opciones de conseguir un trabajo.
• Edad y sexo: Los porcentajes de desempleo cambian dependiendo de la edad y el sexo por cosas como la discriminación o el cuidado de la familia.
• Falta de conocimientos: Los empleados no tienen las habilidades que se buscan para el puesto que hay.
• Empresas con poca estabilidad: Las compañías no dan abasto para contratar a más gente.
• Salario mínimo: Si el salario mínimo es más de lo que las empresas pueden permitirse, se contrata menos.

¿Cuáles son las causas y consecuencias del desempleo?

Hablar de desempleo es hablar de un problema que tiene mil caras. Puede venir de una crisis económica, de cambios en la política o de avances tecnológicos que dejan profesiones enteras atrás. Cuando pega en la economía, en lo primero que se nota es en el Producto Interno Bruto (PIB). Menos gente trabajando significa menos bienes y servicios en circulación. Y claro, con menos ingresos en los bolsillos, el consumo también se frena. Esto impacta directo en la demanda interna y, a la larga, le pega a todo el país.

Pero el desempleo no solo se siente en los números. También golpea fuerte en lo social. La desigualdad crece. Los que pierden su empleo ven cómo su calidad de vida se desploma, mientras que los que mantienen su trabajo apenas sienten. Esto genera tensión, enojo, y no tarda en romperse el tejido social.

Si además el desempleo se prolonga, el riesgo es todavía mayor. Sin opciones y sin ingresos, muchas personas terminan buscando salidas donde no deberían, lo que puede disparar los niveles de delincuencia. Al final, el desempleo no solo afecta el ingreso de las familias. También debilita las bases que sostienen a toda la sociedad.

¿Cómo se puede evitar el desempleo?

Cuando hablamos de combatir el desempleo, no hay una sola fórmula que lo arregle todo. Hay que moverse en varios frentes al mismo tiempo si queremos que el mercado laboral respire otra vez:

• Políticas activas de empleo: Formar gente y garantizar desarrollo profesional. Darles herramientas de verdad. Conectar a los trabajadores con los puestos que sí existen. Y si no hay suficientes, se deberán crear empleos desde el gobierno o en alianza con empresas.
• Políticas macroeconómicas: Aquí la clave es que la economía no se caiga a pedazos. Dar incentivos fiscales. Facilitar créditos. Bajar tasas. Lo que sea necesario para que la inversión regrese y las empresas se animen a contratar.
• Innovación y emprendimiento: Hay que abrir paso a los nuevos negocios. Apostarle a los sectores que están creciendo. Apoyar a quien quiera emprender, porque esas nuevas ideas generan empleos y oxigenan la economía.
• Educación y capacitación continua: Hoy quien no se actualiza, se queda fuera. El mundo laboral cambia rápido. Hay que invertir en cursos, talleres, certificaciones, lo que sea necesario para que los trabajadores no se queden atrás.

¿Cómo afecta el desempleo a las familias? 

El desempleo impacta de manera profunda, afectando lo más cercano: la familia. No es solo el ingreso que falta, es esa sensación de incertidumbre que se instala día tras día. La presión se acumula en el ambiente, las preguntas sin respuesta empiezan a pesar más de lo que parecen. Sin empleo, la estabilidad en casa se resquebraja poco a poco.

Con el paso del tiempo, la situación económica se va haciendo más difícil. Ya no alcanza para todo. Es necesario priorizar, decidir qué se puede pagar y qué se debe posponer. A veces es el pago de la renta, otras veces la colegiatura de los hijos, o incluso la alimentación. En cada toma de decisiones, la angustia se incrementa. Es inevitable que todo esto afecte el estado de ánimo de quienes viven bajo el mismo techo.

Los niños perciben mucho más de lo que creemos. Aunque no siempre lo expresen, sienten el estrés. Lo llevan consigo, a la escuela, donde afecta su concentración, su rendimiento y les quita las oportunidades que deberían estar aprovechando. El desempleo no es solo una interrupción en el trabajo. Es una serie de efectos que pueden marcar a una familia por años.

No basta con observar los números de desempleo en un informe. Es fundamental entender lo que realmente significa en la vida cotidiana de aquellos que lo viven. Es aquí donde los verdaderos líderes deben tomar acción.

¿Qué papel tienen los recursos humanos frente al desempleo?

Cuando hablamos de recursos humanos y desempleo, hay algo que no podemos ignorar: tenemos un papel gigante en este tema. No es solo el proceso de reclutamiento, selección de personal, y  encontrar talento humano para llenar vacantes, es lograr que las personas correctas aterricen en el lugar correcto. También la capacitación y el desarrollo continuo son parte fundamental del trabajo. Esto permite que los colaboradores actualicen sus conocimientos y estén listos para los cambios que trae el mercado laboral, evitando así quedarse fuera por falta de competencias.

Otra pieza importante son los planes de sucesión. Gracias a ellos, las empresas pueden cubrir vacantes de manera organizada y planificada, sin recurrir a algún despido innecesarios. Y no menos importante, fomentar una relación laboral sana ayuda a construir un ambiente de trabajo estable. Esto no solo mejora la retención de talento, también baja la rotación de personal, dos factores que impactan directamente en el desempleo.

Claro, el desempleo no es un problema sencillo. Tiene raíces económicas, sociales y laborales que afectan tanto a las personas como a la sociedad en general. Su impacto en la economía y la estabilidad social hace urgente actuar. Promover políticas que impulsen el empleo, la innovación y la capacitación continua es vital para darle la vuelta a este reto. Desde lo individual, actualizar habilidades constantemente marca la diferencia. Y desde lo colectivo, la colaboración entre empresas, gobiernos e instituciones es la clave para construir soluciones reales y sostenibles frente al desempleo.

Preguntas frecuentes

¿Cómo protege la NOM 035 a los trabajadores frente al desempleo?

La NOM 035 no elimina el desempleo, pero ayuda a que menos personas se vayan o sean despedidas. Si el ambiente es pesado, la gente renuncia. Si no se cuida el clima, también habrá más despidos. Por eso detectar factores de riesgos psicosociales a tiempo cambia las cosas. No es magia, pero ayuda.

¿Qué es la liquidación en el desempleo y cómo se calcula?

La liquidación es lo que se recibe cuando terminas tu contrato laboral. Para calcularla, dependerá del salario, del tiempo trabajado y otras cosas. No siempre es igual para todos, y a veces hay detalles que pueden cambiar el monto, como si hubo o no acuerdo.

¿Qué es la indemnización por desempleo y quién tiene derecho a recibirla?

La indemnización por desempleo aplica cuando fue despido injustificado. Aquí la Ley Federal del Trabajo (LFT) es clara: tres meses de salario, más aguinaldo, vacaciones, prima vacacional.

Te recomendamos revisar nuestra tabla de vacaciones o usar la calculadora prima vacacional para entenderlo mejor. También puedes ver la calculadora aguinaldo.

¿Cómo impacta el IMSS en las prestaciones por desempleo?

Cuando pierdes el trabajo, no pierdes de inmediato tu seguro médico. El IMSS impacta las prestaciones por desempleo al ofrecer seguros de gastos médicos que te cubren unas semanas más, generalmente cinco. Eso te da un respiro mientras buscas otra oportunidad o ves qué sigue.

¿Qué relación tiene el desempleo con el desempeño laboral?

No es secreto: si el desempeño baja mucho, vienen los recortes. Aumentando el riesgo de despidos, pero a veces no hay opción. Las empresas necesitan resultados para sobrevivir. Y cuando el trabajo no fluye como debe, los ajustes llegan para mantener la productividad y eficiencia.

¿Qué papel juega la cultura organizacional en la prevención del desempleo?

Un buen ambiente de trabajo no solo hace más felices a todos. También hace que la gente quiera quedarse. Una cultura organizacional que escucha, que impulsa el desarrollo personal, y que apoya, reduce el riesgo de rotación y, con ello, el desempleo.

¿Cómo afecta el contrato individual de trabajo en situaciones de desempleo?

El contrato individual de trabajo deja todo por escrito. Define las razones válidas para un despido, los pagos que tocan si ocurre, y protege a ambas partes. Es la base que evita problemas más grandes cuando las cosas no salen como se esperaban.